Friday, January 29, 2010

Alianzas por el poder

Ha comenzado la batalla político-electoral de 2010 y, en ese contexto, el tema de las campañas entre partidos ha ocupado un lugar destacado en la agenda de discusión.
Desde finales de 2009 se anunciaba la importancia que adquiriría este asunto. Los triunfos del Partido Revolucionario Institucional (PRI) en las elecciones de julio pasado, lo que está en juego en los comicios de este año y la carrera anticipada hacia 2012 son factores que explican el interés de las fuerzas políticas por unirse y buscar los mejores resultados en las urnas.
Sin embargo, por lo que se observa, esa posibilidad de que dos o más partidos se alíen apunta a que la única prioridad de los institutos políticos es acumular poder, dejando de lado o en el olvido la congruencia con sus principios o las preocupaciones de la ciudadanía.
Los partidos Acción Nacional (PAN) y de la Revolución Democrática (PRD), que después de las votaciones del 5 de julio perdieron peso en la Cámara de Diputados y cinco de seis gubernaturas frente al PRI, negocian ir en conjunto contra el tricolor para los comicios en los que se renovará el gobierno de cuatro estados: Oaxaca, Puebla, Durango e Hidalgo. Las otras entidades en las que habrá comicios de ese tipo son Tamaulipas, Veracruz, Chihuahua, Aguascalientes, Sinaloa, Zacatecas, Tlaxcala y Quintana Roo.
Ahora bien, tanto analistas como militantes y ciudadanos han señalado lo contradictorio (“aberrante”, dicen otros) de un pacto entre institutos tan opuestos como el blanquiazul y sol azteca.
En el caso del panismo, una unión de esa naturaleza ha sido cuestionada por el propio secretario de Gobernación, Fernando Gómez Mont, y del lado del perredismo Andrés Manuel López Obrador ha advertido que desconocerá a quien colabore con el PAN.
El PRI, por su parte, ante la posible amenaza sobre su hegemonía en esas entidades, no sólo ha enderezado ataques hacia los acercamientos PAN-PRD sino que ha comenzado a moverse en busca de sus aliados. Los medios han informado que el Revolucionario Institucional y el Partido del Trabajo (PT) hacen planes para hacer frente a la candidatura del PRD y Convergencia en Zacatecas, pues argumentan que ésta será una imposición de la gobernadora Amalia García.
Panistas y perredistas promotores de las alianzas defienden estas acciones —formalmente legales— amparándose en la necesidad de frenar el avance electoral del PRI y, por ende, su camino de regreso a la Presidencia de la República. No obstante, como han escrito los académicos Víctor Reynoso y Mauricio Merino, en ese afán de triunfo incurren en el mismo pragmatismo que critican en el PRI.
Peor aún, en esa ambiciosa batalla PAN y PRD se concentran en mejorar sus posiciones teniendo en mente el 2012, pero no parecen preocupados en diseñar y comunicar programas de gobierno que sean una alternativa viable respecto de los del PRI. Y como el tricolor, tampoco se muestran interesados en conocer a la ciudadanía, en representar la pluralidad del país, en gobernar con mayor eficacia ni en generar un acuerdo de largo plazo para sacar al país del estancamiento en el que está.
Tal vez las alianzas reporten algunas victorias para ambos partidos y ello les permita emparejar la competencia con el Revolucionario Institucional. Tal vez sea el otrora partido hegemónico el que en el balance electoral de 2010 se alce con más triunfos y afiance su retorno a Los Pinos. Lo seguro, en todo caso, es que los mexicanos en conjunto no ganaremos nada con estos pactos cuya única meta es el poder por el poder.


Nota: Este texto aparece en los Dardos de diasiete.com.

1 comment:

Necio Hutopo said...

" Lo seguro, en todo caso, es que los mexicanos en conjunto no ganaremos nada con estos pactos cuya única meta es el poder por el poder".

Muy buen articulo Don Mau (y sí, ya sé yo que llevo una temporada en que nada me gusta)... muy bueno.