Friday, September 25, 2009

El DF, el agua y la basura

"Ironía", por Boligán


Mientras el agua potable escasea y nuestras tuberías se secan, las lluvias del último mes, inusualmente intensas, nos inundan y causan estragos. De esa forma, en un cartón publicado en el diario El Universal el viernes 18 de septiembre, el caricaturista Ángel Boligán ilustra una de las tantas ironías que vive el valle de México.
La madrugada de este martes, por ejemplo, al sur de la ciudad, el río Magdalena se desbordó y arrastró 16 automóviles de lujo; también dañó otros vehículos, una vivienda y el estacionamiento de un centro comercial. Semanas atrás, al oriente, las precipitaciones anegaron las instalaciones del Metro Hangares. Por si esto fuera poco, las condiciones climatológicas han entorpecido el servicio de recolección de basura y que ésta pueda ser transportada a sus depósitos correspondientes. Es claro: nuestros problemas urbanos, literalmente, salen a flote.
Fundamental resulta comprender las interconexiones entre estos asuntos: la escasez del agua potable, los efectos de las fuertes lluvias y el manejo de los residuos sólidos.
La falta de mantenimiento y de modernización de la infraestructura hidráulica ha derivado, por un lado, en que 30% o más de nuestros recursos hídricos se pierda en fugas y no llegue a amplias zonas de la capital como la delegación Iztapalapa. Por el otro, esos rezagos históricos que padece la red también han provocado que el drenaje sea incapaz de hacer frente a tormentas como las que hemos observado en días recientes.
Sumemos a eso las 12 mil 500 o 13 mil toneladas de desechos que generamos todos diariamente, y a las cuales se les debe encontrar acomodo o procesar a fin de que no obstruyan calles y alcantarillas como ahora lo hacen, y ya tenemos delineado el tamaño del reto que vivimos.
¿Qué nos ha conducido a esta situación? Me parece que estos problemas tienen en común tres tipos de orígenes, uno político, uno demográfico y uno sociocultural, y que verlos desde una perspectiva que abarque esos campos podría permitirnos pensar en soluciones.
Hace tiempo que tengo la impresión —imagino que compartida— de que los políticos que se han encargado de esta ciudad y de su área conurbada nunca se han preocupado en serio por planear su desarrollo a futuro. Asimismo, el crecimiento poblacional producto del número de nacimientos o de las migraciones ha sido tal que ha disparado la demanda de servicios como vivienda o transporte, que autoridades o particulares han buscado satisfacer bajo la lógica de la inmediatez o del lucro, mas no de la sustentabilidad.
A ese patrón de gran expansión, que seguramente se repite en otras metrópolis de México y de otros países, se agrega el predominio de lo que Alejandro Calvillo denomina “voraz modelo de consumo”. Trátese de agua, energía, alimentos o mercancías, ese paradigma nos lleva a consumir a diestra y siniestra sin reparar en las consecuencias. Y así, no hay ciudad ni planeta que alcancen.
Estas semanas de baja presión en nuestros grifos, de avenidas inundadas o de basura varada en los caminos son una advertencia sobre la crisis que puede desatarse en nuestra capital si no actuamos pronto y con sentido de largo plazo.
Contamos ya con alternativas expuestas por especialistas, desde un plan para descentralizar las actividades de esta urbe o el diseño de mecanismos para captar y aprovechar el agua de lluvia, hasta la reutilización y el reciclaje de residuos sólidos, pasando —claro— por nuestra responsabilidad de ejercer un uso más consciente y racional de los recursos de los que disponemos. Con todos sus defectos, esta ciudad es nuestra casa. Hagámosla habitable.


Nota: Este texto aparece en los Dardos de diasiete.com.

1 comment:

Root said...

Mi Príncipe!! Qué bueno que rescataras la caricatura de Ángel Boligán porque pocas cosas ilustran tan bien el desastre en que se ha convertido este lugar.

Mi comentario en serio está en la otra pág. acá nomás es para dar aviso de que regrese!!

Jajaja... Ya prometo no abandonarte tanto aunque me esté ahogando en deberes.

Te quiero.

Ruth