Tuesday, September 22, 2009

El Senado, con oportunidad de frenar a Chávez: De la Rosa

Visitador de la CEDH en Chihuahua refiere que aspirante a encabezar la PGR incurrió en omisiones durante su desempeño como procurador de esa entidad, en la gubernatura del panista Francisco Barrio Terrazas


El eventual rechazo de parte del Senado a la nominación de Arturo Chávez Chávez como procurador general de la República podría representar “un momento histórico en las relaciones entre el presidente y el Congreso de la Unión”, señaló Gustavo de la Rosa, primer visitador de la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH) en Chihuahua.
Para De la Rosa, si los senadores del PRI y del PRD niegan la ratificación en la PGR a Chávez Chávez, propuesto por Felipe Calderón para sustituir a Eduardo Medina Mora, y cuya postulación ha sido criticada por activistas y por organizaciones no gubernamentales, propinarían una derrota a la administración calderonista e, igualmente, dejarían al descubierto que México vive ya en un sistema de corte parlamentario aunque se le siga llamando presidencialista.
Chávez Chávez, quien fue procurador de Chihuahua durante el gobierno del panista Francisco Barrio Terrazas (1992-1998), ha sido cuestionado por su falta de acción para resolver los feminicidios que comenzaron en Ciudad Juárez en la década de los 90. Ayer, durante su comparecencia ante el Senado,
reconoció que hubo errores en la investigación de ese expediente, aunque retó a que se pruebe que haya actuado con parcialidad.
De la Rosa, sin embargo, advirtió que en su momento el funcionario no sólo incurrió en omisiones en el caso de las mujeres asesinadas en la entidad, sino en los de los levantones y los homicidios vinculados al narcotráfico, que también ocurrieron durante su gestión.
En entrevista telefónica, el visitador relató que cuando Chávez Chávez fue procurador estatal, él se desempeñó como director del Centro de Readaptación Social (Cereso). De esa manera, el “trato cercano” le permitió observar que las reacciones del fiscal hacia esos hechos tendían a culpar a las víctimas; éstas, justificaba, se metían en problemas por relacionarse con narcos o “por andar en lugares peligrosos”.
“Nunca tuvo claro que lo que estaba sucediendo en Juárez eran crímenes de odio”, comentó De la Rosa. Por ello, dijo, cuando Chávez Chávez terminó sus funciones en la procuraduría, dejó “cuentas pendientes”, entre ellas, 197 desapariciones sin investigar.
A juicio del visitador —
quien ha recibido amenazas de muerte motivadas por su labor—, a pesar de las críticas Felipe Calderón se obstinará en que su nominado llegue a la PGR porque responderá a sus intereses: “Será el abogado del presidente, no el de la nación”. En ese sentido, descartó que sea una estrategia de Los Pinos haber propuesto en primera instancia a una figura cuestionada para que, una vez rechazada, la segunda opción deba ser aceptada.
Sostuvo que, independientemente de la persona que quede en el cargo, para atender los pendientes y rezagos que enfrenta México en materia de justicia debe contemplarse, primero, el rescate de los buenos elementos en las corporaciones policiacas pues no todos han sido corrompidos. Otra meta, ahondó, debería ser reclutar a los abogados recién egresados de las universidades con el propósito de formar agentes ministeriales que estén del lado de la ley.
Asimismo, recalcó que es fundamental que las autoridades acaben con el secuestro y con la extorsión debido al gran daño social que originan, y que, respecto del combate al narcotráfico, se discuta la legalización de ciertas drogas como la mariguana y la cocaína, se prevengan adicciones a otras como el cristal y la piedra, y se ataquen las finanzas de los cárteles.
Esos temas urgentes, concluyó De la Rosa, no parecen estar en la agenda de Chávez Chávez: “Ojalá los senadores tengan la capacidad de verlo”.


Nota: Este texto aparece en e-joven.

1 comment:

Elizabeth García said...

Muy bien amor.
Te amo.
:)