Monday, February 22, 2010

Evo Morales promueve en México la creación de una OEA sin Estados Unidos [crónica]


En su visita a la ciudad de México, el presidente de Bolivia criticó las políticas de Washington y llamó a América Latina a instaurar el “socialismo comunitario”

Los gritos “¡Evo, Evo!” sonaron en Coyoacán. “¡Aquí sí te queremos!”, se escuchó en el Hemiciclo a Juárez. Evo Morales, presidente indígena y socialista de Bolivia, se dijo sorprendido por el recibimiento de cientos de personas que lo vitorearon el domingo, durante la visita que realizó al Distrito Federal antes de viajar a la Cumbre de la Unidad de América Latina y el Caribe que se celebra en Cancún.
En su recorrido por la capital de México, Morales reiteró su intención de presentar en el encuentro de Cancún una propuesta para crear una “nueva OEA”, un organismo regional distinto a la Organización de los Estados Americanos en el que no esté incluido Estados Unidos. Afirmó que esta acción es necesaria para que América Latina se libere de las políticas de Washington, a las que calificó de imperialistas.
También dio ánimos a la izquierda mexicana representada por los sectores del Partido de la Revolución Democrática (PRD) y del Partido del Trabajo (PT) afines a Andrés Manuel López Obrador, y ofreció esperanza de cambio a movimientos sociales como los indígenas, los comuneros de San Salvador Atenco y el Sindicato Mexicano de Electricistas (SME).
Morales, de 50 años, líder de campesinos cocaleros y presidente de Bolivia desde el 22 de enero de 2006, fue recibido en Hemiciclo a Juárez por el jefe de Gobierno del Distrito Federal (GDF), Marcelo Ebrard. Ahí, en un acto que duró menos de un minuto, montó una guardia de honor en memoria del Benemérito de las Américas.
La jornada continuó en el Antiguo Edificio del Ayuntamiento, donde Morales fue homenajeado como huésped distinguido de la ciudad y escuchó a su anfitrión. “Evo Morales demuestra que un país sí puede tener un gobierno popular”, dijo Ebrard. El mandatario boliviano agradeció la invitación a la capital mexicana y señaló que el bicentenario de la Independencia de México es un buen momento para que la nación se redefina a favor de las mayorías.
Por la tarde, hacia las 5:00 pm, Morales arribó al jardín Hidalgo de la delegación Coyoacán. Banderas de Bolivia y gritos de “¡Evo, Evo!” enmarcaron su llegada. Algunas personas, molestas porque la prensa les dificultaba ver el escenario, aseguraban haber estado esperando al invitado por cuatro horas y arremetían contra “la manipulación de los medios”.
La gente pedía a Evo, quería ver a Evo, a quien acompañaban en el presídium el jefe delegacional de Coyoacán, Raún Flores —abucheado en su intervención—, así como figuras de la izquierda mexicana. Poco a poco llegaron la senadora Rosario Ibarra, los diputados Porfirio Muñoz Ledo, Alejandro Encinas y Gerardo Fernández Noroña, el dirigente de los electricistas, Martín Esparza, y el ex procurador capitalino Bernardo Bátiz.
Por fin Evo Morales tomó la palabra. En su mensaje recordó la lucha que vivió con los movimientos sociales bolivianos en la década de los 90. Aseguró que fue gracias a ellos, a la unidad que consiguieron, que alcanzó el poder. También dijo que ha sido por medidas como la expropiación de los hidrocarburos que la economía de Bolivia se ha fortalecido al grado de crecer 5% en 2009 a pesar de la crisis.
Aliado político del cubano Fidel Castro y del venezolano Hugo Chávez, Morales criticó a Estados Unidos, al Fondo Monetario Internacional, al Banco Mundial, al neoliberalismo y a los gobiernos “oligarcas”. Sus palabras encontraron eco en los partidarios de López Obrador presentes el mitin, quienes gritaron “¡Fuera!” al presidente Felipe Calderón.
Morales afirmó que América Latina dejará atrás el capitalismo y verá surgir el “socialismo comunitario”. Dijo que compartirá su “pequeña experiencia” de gobierno con los mandatarios convocados a la cumbre de Cancún y resaltó la importancia de los movimientos sociales en el acontecer de un país.
Antes de despedirse, expresó: “México pronto se liberará”. Agradeció el recibimiento de la gente en el jardín Hidalgo, cerró el acto, alzó la mano y se fue. De nuevo, como a su llegada, los gritos “¡Evo, Evo!” acompañaron su paso.

Nota: Un ejercicio de reporteo y redacción publicado en CNN México.

2 comments:

Elizabeth García said...

Y sacaste la crónica.
Bueno amor, espero que les gustara a tus jefes.
Te amo, mucho.

Necio Hutopo said...

Don Mau, la crónica está bien escrita, no me mal entienda; lo está... Pero es profundamente tendenciosa y no necesariamente hacia Evo.

De verdad usted contó "cientos de personas", de dioptrías anda bien?...